Guadamur
La historia de Guadamur es un curioso paralelo a las Guerras de las Rosas, ya que fue construida a causa de un conflicto entre dos familias nobles locales como refugio cuando el otro lado estaba en el poder.
En 1502 este castillo albergó a dos de los reyes más coloridos de España, Felipe el Hermoso y Juana la Loca.
El castillo es hoy propiedad de un empresario madrileño y técnicamente debería estar abierto al público, aunque está rodeado de una muralla bastante alta para mantener alejados a los campesinos, a los que sólo se les permite entrar si transportan diezmos, víveres o vírgenes.
