Basada en una historia de Robert Louis Stevenson, y con un reparto que incluye a Oliver Reed, Donald Pleasance y el actor de carácter español por excelencia, Fernando Rey, monumentos españoles como la catedral de Ávila nos transportan de vuelta a la carnicería de las Guerras de las Rosas ingleses, y la catedral se utiliza para la escena nupcial y también para la escena del claustro donde Pleasance (Sir Oliver Oates) traiciona a Reed (Sir Daniel) con Rey (El Conde de Warwick).
La ciudad amurallada de Ávila interpretó a la ciudad amurallada de York.
El castillo de Guadamur luego se convierte en la guarida de Oliver Reed.
Como la película se desarrolla durante las Guerras de las Rosas, y al ser una película de Disney, aborda las complejidades de la historia de una manera convincente, que se puede resumir como “rojo bueno, blanco malo”.
Pedro A. Alonso fue una de las muchas personas locales que actuaron como extras en la película. (Se le puede ver vigilando el castillo cuando uno de los hombres de Reed regresa muerto de una sobredosis de flechas).
Pedro recordó que el director se enfureció con los figurantes, que no pudieron evitar mirar a la cámara y saludar a sus amigos.