Realizada dos años después de El Cid, la película cuenta una historia similar de caballeros españoles, esta vez liderados por Fernán González (923-970), que heroicamente aniquilaron moros, rompiendo tratados (¡De acuerdo, cien damiselas cristianas a cambio de paz como táctica de negociación no es políticamente correcto hoy en día, pero un trato es un trato!), y tratando de unir a España, o a la siguiente mejor versión de ella.
Lo mejor de la película es, sin duda, el paisaje, incluido el castillo de Berlanga de Duero, que se supone que será el pueblo natal de Fernán desde el exterior, con sus espectaculares murallas, aunque cuando nos adentramos en él, nos encontramos en La Alberca, en la provincia de Salamanca, con su emblemática cruz en la Plaza Mayor.
Aquí Fernán es proclamado Conde después de la muerte de su hermano, y se va corriendo (a caballo por supuesto) para arreglar el asunto de las cien doncellas.
Agradecemos a Julián de la Llana, especialista en cine de Soria, por su ayuda con esta información.