Raquel Welch nos sorprende a todos con un bikini en esta frívola película rodada en las playas malagueñas de Torremolinos, Mijas, Nerja (donde Raquel es serenada por jóvenes que tocan música flamenca) mientras desciende por la Cuesta de la Calahonda hacia Playa Calahonda.
Paracaidistas, espías y villanos chinos que roban bombas atómicas son el telón de fondo de la verdadera trama, que es el cuerpo de Raquel.
¡Y, por si no estabas seguro de que esto fuera filmado en España, Raquel es perseguida y derribada por un toro en una plaza de toros!
Cuando Raquel montar a caballo con Anthony (¿es el villano, es el héroe?) Franciosa, después de tirar un cuerpo por un acantilado, él la deja en Mijas, con el castillo claramente visible justo a la izquierda de la aldea.